Diccionario Hapinary
9.11.2024 1:01 AM
La educación financiera ya no es solo para unos pocos privilegiados. Ahora tenemos más acceso a la información (recuerde optar por fuentes confiables) que permite a cualquier persona haga que el dinero funcione con inversiones inteligentes. Aquí en Hapi, al igual que usted, aprendimos a lo largo del camino y vimos la necesidad de crear y compartir un diccionario financiero práctico, para que pueda entender fácilmente los términos básicos que todo inversor necesita para comenzar su viaje hacia la libertad financiera.
¡Úselo sabiamente! Término de hoy:
Para empezar con una idea clara de este concepto, pregúntese: ¿Qué herramientas necesita un mecánico para trabajar? ¿Qué recursos físicos y no físicos utiliza Starbucks para entregar tu café? Estas son algunas preguntas sencillas que le ayudarán a imaginar e identificar fácilmente los activos fijos. Echemos un vistazo a estos recursos:
¿Cuáles son sus activos fijos? Las más importantes (como dicen) son las máquinas de café espresso diseñadas exclusivamente para su marca. Además, los muebles, los utensilios, etc., son claros ejemplos de los activos fijos tangibles que la empresa utiliza para prestar su servicio. Entre los activos no físicos, podemos mencionar ejemplos como las licencias de operación, los derechos de marca, el software, entre otros, que representan los activos fijos intangibles.
Con esto en mente, construyamos la siguiente definición:
Los activos fijos son los bienes o derechos (tangibles o intangibles) necesarios para garantizar el funcionamiento y la continuidad de una empresa. Son fijos porque no cambian durante un año fiscal.
Para agregar a este concepto práctico y simple, veamos algunos de sus características clave:
Al final, nada es eterno en este mundo excepto la propiedad de la tierra (este activo no se deprecia).
En general, la mayoría de los activos de las empresas pierden valor con el tiempo por varias razones, entre ellas obsolescencia, el desgaste o la necesidad de mantenerse al día con avances tecnológicos. Este proceso se denomina depreciación. Es importante diferenciarlo del término devaluación, que está relacionado con el valor de la moneda de una región.
De hecho, no cabe duda de que el dispositivo que tienes en tus manos ahora mismo se está depreciando mientras lees este post, porque su valor será menor en cinco años y tendrás que actualizarlo. ¿Te imaginas comprarlo solo con el beneficios de una buena inversión? No te pierdas nuestras publicaciones semanales y síguenos en Facebook, donde compartimos muchos consejos financieros.
Desde un punto de vista económico, no son lo mismo. Añadamos otra palabra a este diccionario financiero. La diferencia principal es:
Su clasificación puede variar en función de tres criterios:
Veámoslo de forma sencilla, con ejemplos:
Cuando hablamos de activos tangibles (también llamados activos físicos), nos referimos a aquellos que podemos tocar y ver:
Para el segundo criterio, «funcionamiento y uso», se refiere esencialmente a si los activos se utilizan en actividades comerciales diarias, cuando activos operativos son los equipos o herramientas de fabricación, los activos de arrendamiento operativo, etc.
Y activos no operativos son inversiones a largo plazo o activos que no están en uso, como terrenos baldíos.
Este criterio es un poco más complejo y rompe la característica de depreciación de «al menos un año de vida útil». Cuando hablamos de activos corrientes o activos circulantes, nos referimos a los bienes que pueden convertirse en efectivo a corto plazo, menos de un año, o a los que no se deprecian.
Algunos ejemplos incluyen las cuentas por cobrar, el efectivo disponible, el inventario, las inversiones en acciones o incluso los gastos pagados por adelantado. Luego, activos no corrientes son lo que ya hemos discutido: activos fijos destinados a durar más de un año y tienden a depreciarse.
Depende de quién esté interesado en los activos fijos. Si eres un emprendedor que busca iniciar un negocio, conocerlos te permitirá identifique claramente sus medios de producción, determine la inversión en sus activos fijos, como muebles, herramientas, vehículos, materiales de oficina, permisos, etc. Todo el equipo que necesita para generar ingresos.
Para un inversor, conocerlos representa una ventaja adicional (junto con los indicadores de rentabilidad). Son elementos que podemos supervisar de cerca decidir si invertir en una empresa, evaluar la salud financiera, su capacidad de generar dividendos, y su rendimiento general.
Ahora, probablemente se esté preguntando cuántos ingresos genera una empresa en relación con los activos totales que posee. ¡Descúbrelo ahora!
Los inversores, analistas, acreedores y otras partes interesadas suelen utilizar el análisis financiero con la ayuda de varios índices. En este caso, utilizaremos la ratio de rotación de activos para medir la eficiencia.
Ratio de rotación de activos fijos = Ventas/Activos fijos
Si el resultado es superior a 1, significa que el índice de eficiencia es bueno. En otras palabras, la empresa puede generar ingresos suficientes para sí misma y para sus inversores.
Pero hay una excepción: el contexto importa. Si esta métrica muestra un número inferior a 1, pero el sector suele tener cifras inferiores a 0,5, es posible que un índice inferior a 1 siga siendo bueno.
Si, como propietario de una empresa, te conviertes en un experto en la gestión eficiente de tus activos fijos, obtendrás una ventaja competitiva. Y como inversor, ampliar tu vocabulario financiero te ayudará a iniciar tu camino hacia la prosperidad. ¡Empieza a invertir en bolsa con el soporte adecuado!